Diario

La huerta plasmada en un mural

Reflexionando sobre los activos de salud, nos hemos dado cuenta de que sólo echamos de menos las cosas cuando hemos tenido acceso a ellas. Así, en un colegio en el que no haya nada de naturaleza, ésta no se echa de menos. Sin embargo, en un espacio rodeado por naturaleza, bosques, animales y agricultura lo que más valora el alumnado es la huerta. Es el caso del colegio Eduardo Eskartzaga de Gordexola.

Durante el año han trabajado con entusiasmo este proyecto como parte de su apuesta por los Objetivos de Desarrollo Sostenible, el medioambiente y lo local. Han creado la huerta desde cero, plantando, regando y cuidando hasta acabar llevándose verduras a casa.

Por todo ello, parecía claro que iba a ser uno de los activos de salud más relevantes para el propio alumnado. Por lo tanto, no es de extrañar que haya sido el elegido para el mural participativo de la escuela de Gordexola. De ahí el diseño propuesto que incluye la palabra «Ortua» (huerta en euskera) y algunos elementos que la representan.

Para realizar el mural contamos con la ayuda de Fill in Culture, equipo que realizó el diseño, preparó la pared y enseñó al alumnado en qué consiste el muralismo. También dieron consejos para utilizarlo como forma de reivindicación, de expresión, y compartieron los trucos para que un mural se vea vistoso, sencillo y llamativo.

Para conseguirlo, el alumnado de 5º curso empezó a pintar con sprays el esquema que previamente habían preparado. Iban coloreando las letras y el fondo del mural por breves turnos, como medida de seguridad. Y poco a poco fue apareciendo el mural que se había diseñado con anterioridad.

Aunque el proyecto Aktibatuz lo hemos llevado a cabo con el alumnado de 5º curso, el colegio ha querido incluir al resto del alumnado que ha participado en la creación de la huerta. Por lo tanto, fueron pasando las demás clases hasta terminar de pintar todo el mural.

Viendo la alegría del alumnado durante el proceso y el orgullo con el mural terminado, no nos cabe duda de que ha sido una experiencia fantástica. Y nos alegra haber podido cerrar esta etapa del proyecto en Gordexola con esta actividad.

Ahora, cada vez que entren al colegio, pasarán por su obra de arte. Ésta les recordará que la huerta que han trabajado y plasmado en un mural es una de sus riquezas, algo que les aporta salud en más de un sentido.